LO TRÁGICO Y LO CÓMICO
Mientras que el sentimiento estético se mantiene plácido en
lo bello, llega a la excelsitud con lo sublime y al gozo con la gracia; y con
lo feo, lo grotesco y lo ridículo se identifica con lo que tiene de
desagradable la vida misma, la realidad humana es su aspecto doloroso “punza
agudamente, dice Ferré, por introducir en el alma su afilado aguijón". El
hombre se empeña afanosamente por afirmar su personalidad ante un destino que
cree inmutable, se enfrenta a las fuerzas ineludibles de la naturaleza que
sustraen sus propios valores y lo entregan a la adversidad, pero en medio del
dolor que le produce la conciencia de su finitud impotencia ante la muerte, en
medio de sus debilidades se yergue valerosamente y se enfrenta al destino.